En el universo de Harry Potter, creado por J. K. Rowling, existen los dragones. Un punto más a su favor, aparte del asunto de la magia, lo de poder volar en escoba y jugar al Quidditch o lo de los fantasmas. Hay distintos tipos, aunque el más conocido al que se enfrenta Harry en el cuarto libro, «Harry Potter y el cáliz de fuego». Si sabes a cuál me refiero, te gustará tener este sujetalibros dragón colacuerno húngaro de Harry Potter.

Sujetalibros dragón colacuerno húngaro de Harry Potter

Sujetalibros dragón colacuerno húngaro de Harry Potter

El colacuerno húngaro es el más famoso, porque es al que se enfrentó Harry en la primera prueba de la competición de los Tres Magos. Tuvo que robarle el huevo de oro que custodiaba y lo consiguió gracias a su gran habilidad montando en escoba. Pero hay más razas de dragones, de las que se conocen diez. El bola de dragón chino, el hocicorto sueco y el galés verde común también aparecen en la competición de los Tres Magos, pero existen otras especies. El hébrido negro es originario de las islas Hébridas, tiene ojos púrpuras y es el peor enemigo de los grifos, el ironbelly ucraniano es el más grande de todos y es el que usan Harry, Ron y Hermione para escapar Gringotts, el longhorn rumano tiene escamas verdes y largos cuernos dorados, el ridgeback noruego es el que cría Hagrid antes de que se lo quitaran y el vipertooth peruano es el único dragón de Sudamérica y es de color cobrizo con crestas negras. Pero si a ti el que más te gusta sigue siendo el colacuerno húngaro ahora puedes tener una pequeña réplica suya (aunque esta no se moverá ni te escupirá fuego) muy detallada, donde aparece encaramado a una torre de Hogwarts.

Esta figura es un sujetalibros que te ayudará a mantener tus libros firmes en su sitio y que además dará un toque decorativo friki a tu habitación, encantador para todo aquel que al igual que yo sea friki de Harry Potter o de las figuras en general.


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