Los japoneses nunca dejan de sorprendernos con su creatividad, y desde luego, dominan a la perfección el arte de fabricar cosas monas o kawaii. Un ejemplo de estos dones es el Otamatone. Su aspecto es el de una alegre nota musical que sonríe (una corchea para ser exactos), pero si lo tocamos nos damos cuenta de que es mucho más que eso: ¡se trata de una nota musical que canta! Y es que este curioso juguete con forma de corchea es en realidad un instrumento musical electrónico que se toca a dos manos. ¡Un fantástico regalo para cualquier amigo friki músico!
Esta alegre nota cantarina se toca de la siguiente forma: con una mano aprietas la cabeza de goma, haciendo que la boca se abra para cantar. El sonido recuerda bastante al de un sintetizador o un theremin. La nota suena distinto según lo que abras la boca. La nota que emite se controla con la otra mano, ya que el tubo vertical tiene un control táctil. Cuanto más arriba lo toques, más grave suena la nota, y cuanto más cercano a la cabeza, más agudo. Además, el otamatone incluye una pequeña guía que explica su uso y las notas a las que corresponde el control táctil. Es tan fácil de usar que pronto podrás dar un concierto con tus amigos, acompañados por el piano gigante que se toca con los pies.
El otamatone funciona con pilas, abarca una octava, tiene control de bajos y control de volumen detrás de la cabeza, y es tan fácil de usar que incluso alguien que no tenga ni idea de música quedará como un nuevo Mozart ante sus amigos.
Y por si fuera poco, si no os atraen estos colores, en el Reino Unido también tienen otamatones rosas y amarillos. Por supuesto, si vas a hacer un regalo friki, con el negro acertarás seguro, ya que es el que más parece una nota musical tradicional. Y si es un regalo para un amigo al que le guste lo japonés, no dejéis de ver este elegante Paraguas-Katana. ¡Digno de un samurai!
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