Somos muchos los que de pequeños dormíamos abrazados a un peluche, por muy distinta naturaleza que éste tuviera. Nos aliviaba saber que no estábamos solos para hacer frente a las sombras y oscuridad que invadían nuestra habitación por las noches y además seguridad nos aportaban algo blandito que achuchar. Yo también lo hacía, aunque la mayoría de las veces el pobre peluche acababa tirado en el suelo y al final desistí de intentar mantenerlo en mi cama, lo cual lamenté enormemente porque aparte de compañía, un peluche también aportaba calor en las noches frías. Como este genial oso polar para microondas.
Este regalo friki, además de ser una monada, es muy útil en invierno. Los osos polares conservan muy bien el calor (por eso, obviamente, son capaces de sobrevivir al frío extremo del Polo), pero sin duda este oso polar de peluche es el que mejor lo hace de todos. Y sin una sola capa de grasa bajo la piel. Sólo tienes que dejarlo en el microondas durante 2 minutos a 800 wattios para que se mantenga caliente durante 2 horas, y a partir de ahí puedes abrazarlo todo lo que quieras. Además, este peluche es especial en otro aspecto más y es que está relleno de lavanda. Sí, ramilletes de lavanda, de esos que huelen de maravilla, así que cuando estrujes a tu oso calentito contra tu pecho podrás disfrutar de su relajante y agradable aroma.
Regala ya este peluche tan original que gustará a los pequeños y, por supuesto, también a los no tan pequeños. Yo, desde luego, hubiera estado encantada con él hace años e incluso ahora volvería a hacer un esfuerzo por no echarlo de mi cama a altas horas de la noche. Consíguelo y con tu oso de peluche y tus zapatillas para microondas serás la envidia de toda la casa.
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