Agosto, 50º C a la sombra y 90ºC al sol. Podía ser más exagerado pero realmente la cantidad de gente abarrotada, los niños, los mosquitos y las cacerolas al sol hacen que sin duda el camping se convierta en un campo de concentración de puro calor. Bendito es el momento en que os vais a dar un paseo por la noche y os dais cuenta de que habéis perdido el rumbo y no tenéis ni pajolera idea de donde está vuestra tienda de campaña friki. Si esto ha puesto más de una vez vuestra inteligencia a prueba no tendréis que preocuparos con el localizador de tiendas de campaña.
Para ti el camping significa días enteros yendo de excursión a comprar pan a los alrededores del campamento para hacer tiempo. O yendo a la piscina comunitaria caliente lleno de niños y señoras mayores simplemente porque te has visto encerrado entre los planes de tus padres y no tienes nada que hacer. Sin duda alguna, nada más que por aguantar eso mereces un respiro. Este momento de descanso y fenómeno digno de investigación minuciosa se da por la noche, cuando, dentro del calor que hace, puedes olvidarte de la campaña y de la temperatura por unas horas.
El peor momento viene cuando tú, pequeña cabeza despistada que sólo piensa salir de ahí y en conseguir wi-fi cuanto antes (porque todo el paseo es una excusa para dar con algún cartel que tenga la contraseña del internet) te olvidas de dónde se encuentra su tienda de campaña dentro del abarrotado camping.
«¿Qué haría mi madre ahora?» deja de ser una pregunta factible pues tu madre se encuentra contigo y te has cargado el modo de llegar a tu cama, pero tranquilo porque con el localizador de tiendas de campaña solo tendrás que utilizar un control remoto para tener tu vida solucionada en ese mismo momento. Si lo tuyo, por otro lado, es perder las llaves, siempre puedes echar mano del buscador de llaves Sherlock.
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