Si alguna vez no has leído algún libro de la saga de Harry Potter, tú y yo tenemos un problema que resolver, muchach@. NO se puede seguir viviendo sin saber quién es ese personaje al que le han dedicado 8 películas y tantos años de lectura para los más aficionados. Para los que sí lo conocen ¿qué crees que saldría de mezclar a J.K. Rowling con Lego? Ya te digo de antemano que nada bueno, muchas horas entretenido uniendo piezas hasta darle una forma definida perfecta. A estas alturas del artículo te preguntarás (si no has leido el título) «¿de qué demonios de trata?» o «¿piensa largarse y dejarnos a medias?». Soy un impresentable, pero no tanto. Bueno, no quiero ser malo y os dejo con el Castillo de Hogwarts para construir con Lego.
Una persona de mi edad pensaría en cómo pueden hacerse esas cosas ahora y no antes cuando tendríamos una excusa maravillosa para pedirlo como un regalo original, el universo nos odia o algo por el estilo. Ahora, si nos da por comprárnoslo o pedirlo como regalo a tu novi@ o familiar ricachón, nos mirarán de forma rara y lo más bonito que nos pueden soltar es infantil. Pero mi filosofía va más allá; un niño jamás conseguiría construirlo bien, deben dejarnos a nosotros, personas experimentadas y con muchos legos a la espalda.
Si crees que tienes más capacidad que un niño de 8 años y consideras que este castillo merece un hueco en tu casa o cuarto, no dudes en pillarte el castillo de Hogwarts en Lego. La caja, por si vas a tardar mucho en terminarlo, pesa unos 2,1 kilogramos y tiene unas dimensiones de 38,4 x 7,1 x 57,7 centímetros.
Si eres un friki de los lego de los buenos y requetebuenos echa un vistazo a la sección de legos de Regalos Frikis por si quieres completar tu colección de gadgets originales Lego.
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