Las cosas cambian mucho a lo largo de los años. Ahora vemos a los niños pequeños quedándose en casa jugando a videojuegos o al ordenador (¡como buenos frikis!) o con complejos y extraños juguetes que nosotros no tuvimos en nuestra infancia. Yo era, de pequeña, más de salir a la calle a jugar con los amigos y muchos de nuestro juegos eran el quema, el pilla pilla, el reloj reloj, el teléfono escacharrado, o el juego de la botella. Ahora que somos más mayores y nos divertimos con otras cosas, el juego de gira el chupito puede que te interese.
Juego gira el chupito
El juego de la botella, parecido al de El Conejo de la Suerte que se solía cantar en los autobuses al ir o volver de alguna excursión con el colegio, trataban de dar besos. En el de la botella ponías una botella en el suelo y le dabas vueltas hasta que señalara a una persona, que luego tenías que besar. El juego de gira el chupito es parecido, pero sin besos. Llenas el chupito y lo haces girar, y el que acabe siendo señalado tiene que bebérselo. Pero si quieres hacerlo más interesante, puedes modificarlo a tu gusto incluyendo besos, reglas o cualquier otra cosa que se te ocurra. Si eres de esos que suelen atraer las cosas (balones, cagadas de pájaro, orugas procesionarias…) y no aguantas muy bien el alcohol, quizás deberías de abstenerte a jugar a este juego o puede que acabes más morado de lo que quisieras.
Aunque si los chupitos no son lo tuyo, por eso de que no te sientan muy bien, y prefieres beber cerveza cuando salgas de fiesta o organices tú alguna, el rifle de cerveza hará las delicias de todos los aficionados a esta deliciosa y sana bebida dorada. ¡Que nadie se te escape con el vaso vacío, soldado!
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