Antiguamente ser un caballero era algo que solo estaba al alcance de las familias más adineradas. Para el resto del mundo era una profesión que envidiar. Aunque, si tenías mucha suerte, podías colocar a tus hijos o hermanos como banderizo o escudero e intentar que tras el paso de unos cuantos años pudiera llegar a convertirse en un auténtico guerrero con armadura. Pero estas cosas ocurrieron hace mucho tiempo, en la época medieval, donde el honor aún era considerado una cualidad respetable. Si hoy en día aun sueñas con llegar a ser un auténtico caballero, siempre puedes empezar por este gorro de lana con forma de casco medieval.

Gorro de lana con forma de casco medieval

Gorro de lana con forma de casco medieval

Lo mejor de los gorros fabricados con lana es que son súper calentitos y consiguen evitar que el frío penetre por nuestros oídos. Otra característica que poseen la técnica de crochet, es que puede adaptarse en base a cualquier forma, por eso ha sido posible crear un casco, aunque poco protector, para nuestra cabeza.

Ahora podremos protegernos perfectamente de cualquier golpe de frío. Tendremos cubiertas nuestras orejas y la boca.La parte trasera tiene la típica aleta que le da un toque auténtico y friki, digno de los más frioleros, para cortar el viento frío como una katana corta un melón de un solo tajo. En caso de que no necesitéis la parte delantera para cubriros la boca u os agobie mucho, se lo podréis quitar gracias a que va sujeta con botones al resto del casco

Para terminar de complementar el set de frío, para días de lluvia, no os puede faltar el paraguas con forma de espada, así seréis verdaderos caballeros andantes, aunque no tengáis una armadura de alguna aleación resistente y vuestra espada se habrá como una sombrilla de playa. Pero de alguna manera teníamos que empezar…


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